Red Velvet Cake paRa San Valentín o Pastel TeRciopelo Rojo

Llevaba muchísimo tiempo queriendo hacer un RED VELVET aunque nunca pensé que me gustaría tanto... Ha sido una gran sorpresa para mí y ahora entiendo porque lo llaman terciopelo rojo. La suavidad de su bizcocho es increíble y tiene un tacto aterciopelado en la boca riquísimo.

El famoso RED VELVET es una de las recetas que hemos decidido hacer varias amigas blogueras al mismo tiempo. De esta forma compartimos un café y un pastel (virtualmente)  aunque estemos lejos. Nos damos nuestras opiniones y tenemos un mes de charla referente a nuestra receta.

 

    Ingredientes para el bizcocho:

250 gramos de harina de repostería tamizada
1/2 cucharadita de sal
15 gramos de cacao puro
120 gr de mantequilla sin sal a temperatura ambiente
300 gr de azúcar blanco granulado
2 huevos XL
1 cucharadita de vainilla
240 ml buttermilk
2 cucharadas de colorante rojo para alimentos
1 cucharadita de vinagre blanco
1 cucharadita de bicarbonato

Ingredientes para la Cream Cheese Frosting:

227 gr de queso crema a temperatura ambiente
227 gr  de queso Mascarpone a temperatura ambiente
1 cucharadita de extracto de vainilla
115 gr  de azúcar glas muy fina y tamizada
360 ml. de nata para montar (fría ) de 35-40% grasa 

En este caso he utilizado dos moldes idénticos de unos 20 cm de diámetro. Me han salido dos bizcocho que cortados por la mitad serían cuatro planchas de bizcocho.

Preparación del bizcocho:

Encendemos el horno y lo programamos a 170ºC arriba y abajo y aire también.

Ponemos en la batidora los 120 gr de mantequilla sin sal a temperatura ambiente y los 300 gr de azúcar blanco granulado. Batimos  hasta que estén bien integrado y entonces le añadimos los huevos uno a uno. Cuando quede totalmente integrado el 1º añadimos el 2º. Al terminar de añadir los huevos ponemos la vainilla.

En un bol grande mezclamos  la harina, la sal, el cacao y lo tamizamos. Reservamos.

En una jarra ponemos la buttermilch y le añadimos el colorante hasta que nos quede el color que queremos.

Ahora poco a poco iremos añadiendo a la mezcla de mantequilla un poco del bol con la harina y un poco de la mezcla de la buttermich. Hasta que lo hayamos puesto todo iremos mezclando sin dejar de batir.
Por último en un tazón mezclamos vinagre y bicarbonato y rápidamente lo ponemos en la mezcla. Batimos 20 segundo y lo ponemos en dos moldes de unos 20 cm de diámetro. La rejilla del horno la situaremos en el medio.

Ya tenemos terminada la masa así que la distribuiremos entre los dos moldes idénticos y los pondremos en el horno que ya tenemos precalentado a 180 ºC. Cada horno es un mundo así que tendremos que comprobar cuando esta realmente terminado de cocer el bizcocho. Yo lo he tenido 25 minutos en la rejilla del medio con calor arriba y abajo y aire también. 

Los sacamos del horno, dejamos templar durante cinco minutos y los sacamos del molde. Los ponemos a enfriar sobre una rejilla y no sobre un plato o el bizcocho sudaría y se mojaría.

Preparación del frosting:

Mezclamos los dos quesos y el azúcar con la batidora. Batimos durante dos minutos aproximadamente, agregamos la nata y batimos hasta que esté montada.
 

Cuando ya tenemos los bizcochos fríos y el frosting terminado cortamos cada bizcocho por la mitad, elegimos una fuente de presentación y ponemos el primer bizcocho .
Iremos poniendo el frosting capa por capa y al final cubriremos con el restante.
Ponemos nuestra tarta en el frigorífico hasta la hora de comer. Es conveniente cubrir la tarta para que el aire no reseque el frosting y haga una capa fea en  nuestro pastel.

Aquí dejo una fotografía de composición que ha hecho Silvia con todas las tartas que hemos hecho el grupo de amigas que hemos publicado hoy nuestra versión de la RED VELVET:  Conchi, del blog EL PUCHERO DE LA BRUJA, Agnes del blog LES MEUES PEROLES DE FANG, Encarna del blog COPIA COCINA y en especial hago una mención a Silvia del blog LA COCINA DIVERTIDA  por su paciencia a la hora de coordinarnos a todas. Pasaros a ver sus preciosos Red Velvet.